lunes, 20 de septiembre de 2010

26 de Septiembre de 2010


Más que utilizar el manido slogan de que se trata de un deber ciudadano, ir a votar por los representantes del pueblo ante la Asamblea Nacional, es un discurso trágico que me traigo evitando que me resuciten los recuerdos de aquellos interminables días cuando ocurrió el golpe del 11 de abril de 2002 y el paro a finales del mismo ano e inicio del 2003. Oigo hablar a los candidatos opositores al gobierno Bolivariano y les leo los labios mayores y menores de su mente infecta: el llamado a marchas sin retornos, a la gente pa la calle y plazas si los resultados no los benefician, obvio que no serán beneficiados, no pueden beneficiase de los votos del pueblo esgrimiendo una falsa unidad que pregonan allí mientras adentro, son la desunión hecha candidatos, todos con enfoques e intereses distintos y padeciendo de agallas inflamadas. Ojo pueblo de Venezuela.Ve ante la máquina y piénsalo bien, nada es azar dentro de sus intenciones. Mucho dinero ha entrado desde el norte para financiar campanas de sus partidos políticos y el falso emblema de "Unidad" y eso no es gratis, los fondos se prestan para que luego esos grupos minoritarios le vendan la patria porque se las deben. Si eres de oposición, muy bien, pero ser un vende patria es una real cagada.